viernes, julio 10, 2009

Decálogo de la fe


1) La fe es real, indiscutible e incuestionable.

2) La fe se retroalimenta. No depende de cosas que sucedan o que no sucedan, existe en sí misma y para sí misma.

3) La fe se respalda en un Dios.

4) El Dios no es bueno ni es malo, es Dios. Nuestras escalas de valores de nada sirven con Él.

5) Es inútil rezarle o agradecerle al Dios. Nada cambiará por ello para bien ni para mal. El Dios seguirá ahí de todos modos, así como el curso de las cosas no variará para nosotros según actos de ese tipo.

6) La fe y el Dios dan fuerza y sentido a las cosas tan solo por el hecho de estar ahí.

7) No importa porqué ni para qué, ni cuándo ni cómo. Nada importa. Lo único importante es estar sobre ese acantilado y poder cerrar los ojos y dar un paso al frente.

8) La fe no debe ser interesada, debe ser sólo fe. Cualquier cosa que se haga por inercia o por agradar a un Dios no tendrá valor alguno. La fe sólo puede existir si es real, y sólo es real cuando no es racional.

9) La fe debe ser inquebrantable. Nada que suceda puede, para bien o para mal, mutarla en ningún sentido. Si esto sucede, no es fe.

10) Todo esto puede ser mentira, pero es mejor que no lo sea.